Clavo intramedular compresivo promueve curación ósea

El sistema de fusión tibiotalocalcáneo DynaNail XL (TTC) de MedShape (Atlanta, GA, EUA) cuenta con un elemento de compresión interno de NiTiNOL que mantiene la compresión postoperatoria para acomodar hasta seis mm de resorción ósea y de sedimentación. El elemento de compresión también permite una distribución efectiva de la carga por todo el hueso debido al cumplimiento axial durante la carga. Similar a la versión original de 220 mm, DynaNail XL, que está disponible en longitudes de 260 mm y 300 mm, este modelo también tiene un ahusamiento proximal para facilitar la inserción a través del istmo tibial y un orificio de tornillo proximal adicional para un tornillo cortical opcional con el fin de dar una estabilidad adicional.

El DynaNail XL, sin embargo, se adapta mejor a las anatomías tibiales más largas de los pacientes, o si se observan fracturas tibiales. De acuerdo con la compañía, su mayor longitud, en combinación con el elemento de compresión pseudoelástico interno de NiTiNOL, podría ayudar a reducir el aumento de la tensión en el hueso, reduciendo, de esta manera, las posibilidades de fracturas tibiales. El sistema de colocación patentado DynaFrame Carbon-Fiber proporciona un método simple y robusto para insertar DynaNail y activar el elemento de NiTiNOL durante la cirugía, lo que también facilita la dinamización automática una vez que el elemento NiTiNOL se haya recuperado por completo.

“Las recientes incorporaciones al portafolio de DynaNail demuestran nuestro compromiso continuo para mejorar el éxito del producto estrella de la compañía”, dijo Kurt Jacobus, director ejecutivo de MedShape. “Estamos encantados con la creciente adopción de esta tecnología única por parte de cirujanos ortopédicos y podólogos, y anticipamos un crecimiento continuo con estas nuevas ofertas”.

Un clavo intramedular es una varilla metálica que se coloca forzada en la cavidad medular de un hueso, para formar una férula interna autónoma con el fin de estabilizar la fractura. Esto se hace a menudo para el manejo de las fracturas de tibia, fémur y húmero. Las ventajas incluyen una alineación más exacta de los huesos fracturados para una curación más rápida y un soporte de peso más temprano, un movimiento de la articulación con menos tiempo para reducir la rigidez y un movimiento más natural en los músculos no lesionados y las articulaciones vecinas.