Dispositivo manual de imagenología con fluorescencia ayuda en el manejo de las heridas

Un dispositivo portátil de imagenología de fluorescencia permite la visualización en tiempo real, en el punto de atención (POC), de la presencia bacteriana en las heridas, grabando digitalmente imágenes y mediciones del área.

El dispositivo i:X de MolecuLight (Toronto, Canadá) ayuda a la visualización y al seguimiento cuantitativo de la contaminación bacteriana, la curación de heridas y la remodelación del tejido conectivo de sitios quirúrgicos y heridas, mediante el análisis de señales de fluorescencia intrínsecas resultantes de la iluminación con una luz violeta. La luz emitida de banda estrecha hace que los fluoróforos endógenos en las bacterias fluorezcan, sin la necesidad de agentes de contraste. Las imágenes se pueden capturar y documentar como imágenes fijas o videos, incluso en las áreas circundantes donde pueden estar al acecho bacterias más potencialmente dañinas.

Los estudios han demostrado que el dispositivo puede permitir la visualización en tiempo real, en los POC, de áreas focales discretas de colonización bacteriana en heridas abdominales de la línea media, con una sensibilidad del 80% y una especificidad del 70%, lo que ayuda a reducir la probabilidad de administrar un tratamiento antibiótico innecesario. Las bacterias susceptibles incluyen Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (SARM); Pseudomonas aeruginosa; Escherichia coli; Staphylococcus coagulasa negativos; múltiples especies de Enterococcus; múltiples especies de Proteus; Klebsiella pneumonia; Estreptococos beta-hemolíticos (Grupo B); y múltiples especies de Enterobacter.

“La identificación de heridas con cargas bacterianas superiores a 104 UFC /g en el punto de atención permite al médico, que utiliza MolecuLight i:X, proporcionar un tratamiento más apropiado y dirigido”, dijo Anil Amlani, director ejecutivo de MolecuLight. “Los resultados de nuestro estudio clínico demuestran que el i:X utilizado en combinación con signos y síntomas clínicos aumenta significativamente la capacidad de los médicos para identificar heridas con la presencia de estas cargas bacterianas, en comparación con la evaluación de heridas basada solo en signos y síntomas clínicos”.

La luz violeta de baja intensidad en el intervalo de 405 nm excita los tejidos y las bacterias dentro y alrededor de una herida, lo que hace que los tejidos sanos fluorescan con color verde, mientras que las bacterias fluorescen con color rojo o cian. Esto permite su localización inmediata; y aunque las bacterias superficiales generalmente aparecen como un rojo más brillante, las bacterias subsuperficiales a la profundidad máxima detectable de aproximadamente 1,5 mm aparecen de un color más rojo.

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